Al vivir en comunidad, en edificios, tenemos que adaptarnos a las normas comunes y al correcto uso de los espacios compartidos entre todos los vecinos.
Los patios interiores han sido siempre una excelente forma de comunicación entre vecinos, antes de que los smartphones llegasen a nuestras vidas y antes de tener unos horarios interminables en los trabajos.
Algunas comunidades de vecinos permiten que los vecinos que tienen acceso desde sus hogares al patio, disfruten de un uso privativo.
¿Qué es el uso privativo de un patio de vecinos?
Este vecino puede disfrutar del espacio común del patio pero no puede realizar ninguna modificación que lo altere, por ejemplo, poner un techado. Sí que es su responsabilidad que esté limpio y el mantenimiento ordinario.
Este vecino no puede realizar actividades que molesten a los demás vecinos y, por supuesto, los demás vecinos no pueden arrojar colillas o sacudir las migas del mantel
Patios de uso no privativo
Si hay puerta de acceso desde el rellano, se suele dar el problema de que algún vecino lo use como particular: para dejar la bombona de butano o la bicicleta. Estos usos deben ser consensuados en las juntas de propietarios y si se decide permitir el uso para aparcar las bicicletas, serán todos los vecinos quienes puedan usarlo.
Si tenéis algún problema con el uso del patio por parte de algún vecino recomendamos hablarlo con esa persona. El presidente de la comunidad de vecinos podrá añadirlo al acta de la próxima junta.
Si sigue haciendo un uso indebido, debéis comunicarlo al Administrador de Fincas quien con los estatutos de la Comunidad de Propietarios en la mano y su conocimiento de la Ley de Propiedad Horizontal os ayudará.
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