En primer lugar debemos aclarar qué es un proindiviso. Un proindiviso se da cuando varias personas comparten una propiedad. Si decimos un inmueble en copropiedad se entiende mejor.
Cuando se recibe una herencia o se produce un divorcio, el bien inmueble suele quedar en situación de proindiviso, esto supone que ninguno de los copropietarios tenga derecho pleno sobre la propiedad.
¿Puedo vender mi parte de una vivienda en proindiviso?
Si has recibido un piso en herencia, no te convertirás en propietario hasta que hayas aceptado la herencia y se haya inscrito el nuevo estado en el registro de la propiedad.
Vender un proindiviso
En el caso de los inmuebles, normalmente no son divisibles por lo que habría que llegar a un acuerdo si alguno queire vender, comprar o simplemente romper el acuerdo. Cuando llega a nuestra inmobiliaria un propietario que necesita información sobre la venta de proindiviso, suele venir con una falta de acuerdo. Planteando si podría vender su parte del proindiviso o solicitando la valoración gratuita de la vivienda para intentar animar a las otras partes a vender.
Disolución de proindiviso
Uno de los casos más frecuentes por los que hay que vender en proindiviso es por un matromonio casado en régimen de gananciales. Lo mejor, como en casi todos los aspectos de la vida, es llegar a un acuerdo. Si las negociaciones no dan fruto, una de las partes demandará sin tener en cuenta lo caro que le puede resultar el juicio con sus costas y gastos asociados. Si se llega a la subasta pública para la venta, el precio será (casi con total seguridad) inferior al del mercado. Esta es una gran oportunidad para quienes buscan invertir y comprar un proindiviso
Debemos tener en cuenta que según el código civil, en el artículo 400: «Ningún copropietario estará obligado a permanecer en la comunidad. Cada uno de ellos podrá pedir en cualquier tiempo que se divida la cosa común».
En Torresrubí recomendamos vender antes de firmar el divorcio para que los trámites sean más sencillos así como el reparto. Pero si alguna de las partes no quiere vender se podría llegar a juicio que incluso podría desembocar en subasta pública