Cuando nos decidimos a comprar una vivienda, la mayoría de nosotros, necesitamos solicitar una hipoteca. Los bancos no suelen conceder hipotecas de más del 80% del importe de la vivienda. Para otorgar una hipoteca, los bancos evalúan tres aspectos esenciales: el perfil del solicitante, sus necesidades financieras y la propiedad a hipotecar.
Si el solicitante cumple satisfactoriamente con estos tres criterios, se le concederá la hipoteca. Sin embargo, si no logra superar alguno de estos filtros, no obtendrá la hipoteca, aunque podría haber soluciones dependiendo del escenario.
Perfil del solicitante
Este es el punto más importante, el factor que los bancos examinan con más detalle. Se consideran diversos factores que el solicitante debe cumplir para obtener una hipoteca. Aunque estos criterios pueden variar ligeramente entre bancos, suelen ser similares en la mayoría de los casos.
Aspectos como solvencia financiera, capacidad de pago, nivel de endeudamiento no superior al 35-40%, los ahorros para la aportación inicial, estabilidad laboral, ausencia de deudas pendientes o embargos, si cuentan con avales y otros factores son estudiados en detalle por el banco.
Algunas entidades financieras solicitan comprobantes de ingresos del último año, mientras que otros pueden solicitar información de los últimos dos o tres años.
Las condiciones pueden cambiar según el banco y el momento en que se solicite la hipoteca. Por ejemplo, en periodos de bajos intereses y economía estable, es más probable obtener una hipoteca en condiciones favorables.
Si estás interesado en un análisis gratuito de tu perfil y asesoramiento sobre tus opciones hipotecarias, no dudes en contactarnos.
Requerimientos financieros del solicitante
Tras validar el perfil del solicitante, se analizan sus necesidades financieras, y aquí es donde pueden surgir complicaciones.
Aunque los bancos tienen cierta flexibilidad, a menudo no pueden ofrecer soluciones personalizadas, especialmente en cuanto al porcentaje de la financiación. Muchos solicitantes requieren financiar entre el 80% y 100% del valor de la propiedad, pero la mayoría de los bancos no financian más del 80%.
Existen casos donde el solicitante prefiere una hipoteca a tipo fijo, pero el banco no ofrece ese producto o sus condiciones no son favorables.
Si tu banco no cumple con tus expectativas o necesidades, deberás buscar otras opciones. Desde Torresrubí podemos ayudarte a encontrar la mejor hipoteca para tu vivienda.
Propiedad a hipotecar
Finalmente, el banco evaluará y tasará la propiedad que se desea hipotecar. Se revisarán posibles cargas, limitaciones o problemas con la vivienda. Si la propiedad presenta algún inconveniente que no pueda resolverse, el banco rechazará la solicitud.
Además, se realiza una tasación para asegurarse de que el valor de la propiedad cubre el monto solicitado.
Si todo marcha bien, solo quedará finalizar algunos trámites y podrás firmar tu nueva hipoteca ante notario. Si surge algún problema, será necesario evaluar las posibles soluciones.
Es fundamental considerar que cada persona o familia tiene necesidades distintas y es esencial explorar todas las opciones antes de comprometerse con un banco. Por supuesto, debes entender todos los términos del contrato hipotecario, ya que estarás vinculado a ellos posiblemente duran 20 o 30 años.