A veces querer ser original en la decoración de nuestros hogares puede dar un resultado inesperado. Usar el marrón, uno de los peores colores para pintar el interior de tu casa no es una buena idea ya que el espacio parecerá más pequeño y oscuro. En otras ocasiones os hemos dado consejos para hacer que tu casa parezca más amplia y luminosa.
- Negro: La oscuridad, negatividad y miedo representados en un único color.
- Marrón: Color depresivo que invita al aislamiento.
- Rojo: Puede quedar bien en una pared del salón ya que es un color de energía, pero una habitación con todas sus paredes rojas puede resultar agobiante.
- Morado: Extravagancia e intensidad que impide la armonía con los demás elementos.
- Naranja: distrae la atención, demasiada energía para el hogar.
¿Qué colores se deben evitar en el dormitorio?
El tono neón está de moda, pero no el más indicado para un dormitorio. Si el color es chillón distrae del resto de la habitación y no será el mejor para conseguir un estado de relajación al ir a la cama.
Hay estudios que demuestran que demuestran el impacto de los colores para conseguir un sueño reparador. El azul aporta tranquilidad y estabilidad, el verde recuerda a la naturaleza y relaja. El rosa pálido aporta ternura y dulzura, por eso se elige en muchas habitaciones infantiles. El blanco aporta limpieza, minimalismo y serenidad. El beis simplicidad y paz. No es de extrañar que estos sean los colores más frecuentes en nuestros dormitorios.
Si tu casa está pintada con alguno de los considerados peores colores y quieres vender, puedes ampliar su valor con una mano de pintura con colores claros y neutros para que los compradores valoren todo su potencial. ¿Sabes qué hacer para vender un piso en Madrid? Llámanos